Causas y consecuencias del Maximato en México
Causas del Maximato en México
Arraigada en la ideología de la Revolución mexicana estaba la idea de no reelección, puesto que un sello propio del régimen de Porfirio Díaz era la reelección continua. Generales revolucionarios del estado del nordoeste de Sonora, como de la Huerta, Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles dominaron la política mexicana en los años veinte.
El presidente Venustiano Carranza procuró instalar a Ignacio Bonillas para sucederle. Los 3 generales sonorenses se sublevaron y emitieron el Plan de Agua se decretó para justificar su acción. De la Huerta sirvió como presidente interino a lo largo de 6 meses de junio a noviembre de mil novecientos veinte, cuando Obregón se presentó y ganó las elecciones de 1920, sirviendo un orden de 4 años hasta 1924.
En las elecciones de 1924, Obregón apoyó a Calles sobre de la Huerta, que lideró una revuelta errada y después voló a los USA. Calles ganó la presidencia y sirvió de mil novecientos veinticuatro a mil novecientos veintiocho. Obregón prosiguió siendo una poderosa presencia tras la presidencia de Calles y Calles impulsó un cambio constitucional que dejó una reelección presidencial no sucesiva.
Eso dejaría a Obregón presentarse a la reelección en 1928, y potencialmente a Calles presentarse a las elecciones tras eso. Obregón fue adecuadamente escogido como SLE de Calles, mas fue asesinado en el mes de julio por José de León Toral, un componente católico, antes que pudiese aceptar el cargo. Por lo que Calles terminó con hacerse con el poder. Dando inicio el periodo conocido como el “Maximato”.
Consecuencias del Maximato en México
En 1934, el PNR eligió al general revolucionario Lázaro Cárdenas de Michoacán como su aspirante presidencial. Poco tras su inauguración, no obstante, los enfrentamientos entre Calles y Cárdenas empezaron a surgir.
Las que apoyaban a Calles se opusieron al apoyo de Cárdenas a los sindicatos, en especial a su tolerancia y apoyo a las huelgas, al paso que Cárdenas se opuso a los métodos violentos de callas Y su proximidad a las organizaciones fascistas, sobre todo a las Camisetas Doradas del general Nicolás Rodríguez Carrasco, que hostigaban a marxistas, judíos y chinos.
Cárdenas empezó a aislar políticamente a Calles, sacando a los callistas de los puestos políticos y ex- Swift a sus aliados más poderosos: Tomás Garrido Canabal, Fausto Topete, Emilio Portes Gil, Saturnino Cedillo, Aarón Sáenz y por último Calles mismo.
Calles y Luis Napoleón Morones, uno de los últimos influyentes callistas, fueron acusados de conspirar para volar un tren y puesto bajo detención bajo la orden del Presidente Cárdenas y deportado en el año de 1936 a los Estados Unidos.