Tradiciones de Chiapas
Muchos grupos étnicos viven en Chiapas, que aún mantienen vivas sus tradiciones, idiomas y folclore. Su economía se basa en el cultivo de maíz, frijoles, calabaza, papas, peras vegetales, tomates y otras plantas, y también la cría de animales, como cerdos y aves de corral. Además, muchos nativos de la región de Soconusco trabajan en las plantaciones de café.
Sus grupos étnicos que ahora viven en la región son Tzotziles y Tzeltales en el centro del estado, zona conocida como tierras Altas de Chiapas, Chujes, Choles y Zoques en el Norte, Tojolabalas en el sureste, Mames, Cakchiqueles y Mochos en el sur del estado y también parte de Guatemala y lacandones, que viven en el este de la selva tropical.
Todas estas regiones hablan lenguas derivadas de los mayas, a excepción de los zoques, cuya lengua está relacionada con la de Mixes en el estado de Oaxaca y de los Popolucas de Veracruz. El más grande de estos grupos es el de los Tzeltales, que ocupa el octavo lugar entre los indígenas de México.
En términos generales, los indígenas de Chiapas tienen varias creencias que se repiten de grupo en grupo. Por ejemplo, la idea de que cada ser humano tiene doble animal espiritual en común con casi todos ellos. Este animal, que comparte el destino de la persona. Hasta hace pocos años, los Choles usaban el nombre de una planta o animal como su segundo apellido.
Entre las tradiciones de Chiapas, es común que se practique el culto a los antepasados y se perpetúan leyendas sobre seres supernaturales, demonios y dobles animales que viven en ríos, bosques y definitivamente.
Las Choles, por ejemplo, cuidan de ciertas cuevas sagradas, ya que creen que son hogares de espíritus, que controlan la lluvia, el viento, las tormentas y otros fenómenos naturales. Los lacandones todavía practican el rito en honor del viejo Nojoch-yum-chac, Dios de la lluvia.
Otra característica es el sincretismo religioso de las antiguas creencias y el catolicismo. Los Tzeltals veneran las «cruces parlantes», esculturas asociadas a los ídolos prehispánicos.
De todas las fiestas organizadas por diferentes grupos del estado, el carnaval de Chamula, también llamado Kin Tajimultic, es el más famos
o. Esta es la fiesta más importante de los Totziles e incluye cabalgatas, bailes rituales, procesión de banderas y el espectacular desfile de fuegos artificiales. Estas actividades ceremoniales sirven para reafirmar la identidad del grupo y revivir la religión ancestral basada principalmente en la agricultura.
Los Lancadons todavía se aferran a sus antiguas creencias y las ponen en práctica con regularidad. Por ejemplo, el cabeza de familia alimenta a los dioses con pozol, una bebida hecha de maíz. Este rito se acompaña de matices que reafirman el respeto del grupo por su entorno, su propia historia y continuidad de vida.
Los indígenas chiapanecos practican tanto la brujería como la medicina tradicional, junto con su magia y sus actividades religiosas. Y muchos de ellos creen que la enfermedad es causada por el desequilibrio entre el hombre y su ambiente social o sobrenatural.
Las comunidades étnicas de Chiapas tienen varios sistemas de poder social y administrativo. Hay Mayordomos (Mayordomos), que son los líderes de toma de decisiones de los grupos.
Los Choles tienen una forma tradicional de gobierno bajo el cuidado de los ancianos, mientras que los Lacandones reconocen al miembro más antiguo de Caribal (grupo tradicional de chozas) como su única autoridad. Entre los Zoques, por ejemplo, hay Albaceas, que cuidan de las imágenes, y Fiscales, que están a cargo de ritos, matices y oraciones.
Los trajes coloridos de los grupos étnicos en Chiapas son tan variados como el campo que los rodea. Gran número de sus figuras mitológicas se tejen en sus ropas.